Los policías de la UPOEG circulaban por la carretera luego de hacer labores de riego de cultivos en la comunidad Lomas de Chapultepec cuando fueron emboscados por hombres que iban en una camioneta, quienes los habrían atacado a balazos.
Por Argenis Salmerón
Acapulco, Guerrero, 8 de abril (ElSur).- Hombres armados emboscaron a policías de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) en el poblado de Barra Vieja, lo que dejó a dos integrantes muertos, uno de ellos el comandante Eusebio Severiano Rodríguez, y tres heridos, a tres días de la temporada de vacaciones de Semana Santa.
El ataque a balazos ocurrió en la carretera a Barra Vieja, en una zona turística, en dirección al poblado Alfredo V. Bonfil, a 200 metros del puente que divide a los poblados de Barra Vieja y Lomas de Chapultepec y fue reportado a las autoridades a las 9:30 de la mañana.
El ataque ocurrió un día después de la detención de otro acusado de la desaparición de Vicente Suástegui, hermano del vocero del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositores a la Presa La Parota (Cecop), Marco Antonio Suástegui.
Los policías de la UPOEG, a bordo de una camioneta Ford azul, circulaban por la carretera después de hacer labores de riego de cultivos en la comunidad Lomas de Chapultepec cuando fueron emboscados por hombres que iban en una camioneta gris Jeep Cherokee.
La camioneta de los policías de la UPOEG dio varias vueltas en la carretera y después, los hombres armados los atacaron a balazos, de acuerdo con versión de policías que acudieron al lugar.
Los elementos de la UPOEG se dirigían a la jefatura de la policía comunitaria de las localidades de Barra Vieja, San Andrés y Lomas de Chapultepec, ubicadas en el primer poblado.
Después del ataque a balazos, los policías de la UPOEG se llevaron la camioneta chocada y baleada a la jefatura de la policía comunitaria, en Barra Vieja.
Familiares del comandante de la UPOEG Eusebio y el agente ciudadano recogieron los cadáveres para velarlos en sus casas, en el poblado Lomas de Chapultepec.
En el lugar de la emboscada había varios casquillos de grueso calibre de AR-15 dispersos en la carretera y los restos de la carrocería por el choque, sangre, una bolsa con camarones, incluso masa encefálica, y toda la evidencia tapada con arena.
El ataque dejó dos muertos, uno de ellos el comandante, y tres heridos, quienes están en una clínica privada en Barra Vieja, mientras que los agresores huyeron en dirección al poblado Alfredo V. Bonfil.
Un policía ciudadano de la UPOEG, que no dio su nombre, manifestó que la emboscada fue por “envidia, nuestro comandante era muy amable y no tenía problemas”.
Contó que los policías de la organización salieron de la jefatura para trasladarse al campo en Lomas de Chapultepec, “ellos van a hacer riego a sus parcelas que sembraron”.
Añadió que al regresar fueron emboscados por hombres armados, “parece que fue gente armada que quiere tomar el control” de la zona.
Efectivos de la Guardia Nacional fueron a la jefatura de la comandancia de la UPOEG en Barra Vieja a preguntar sobre lo sucedido, después se retiraron, sin embargo unos 10 minutos después acudieron al lugar donde fue la emboscada donde estuvieron unos 20 minutos.
Los vecinos se asomaron por las puertas y ventanas para ver las diligencias, pero no salieron de sus casas.
Dos muertos y tres heridos durante una emboscada en la carretera que comunica a Lomas de Chapultepec en la comunidad de Barra Vieja #Acapulco #Guerrero#ElMéxicoReal pic.twitter.com/7LKKTzYZ4O
— El México Real ? (@InfSinCensuraMx) April 7, 2022
Policías ministeriales y el agente del Ministerio Público sector Costa Azul llegaron casi dos horas después del ataque a balazos para hacer las diligencias.
El poblado de Barra Vieja se ubica pasando la zona Diamante de Acapulco, en dirección a la región de la Costa Chica. En todo el corredor de la carretera de Barra Vieja hay restaurantes de mariscos, enramadas y misceláneas.
Los gobiernos estatal y municipal no emitieron comunicado de la emboscada contra los agentes de la UPOEG en una zona turística de Acapulco.
Se supo que después de las 14:00 horas que policías de la UPOEG acompañados de comisarios de las comunidades de Barra Vieja y El Podrido fueron donde militares tenían instalado un filtro de revisión, a menos de un kilómetro de donde fue la emboscada, para pedir que permitan que usen armas cuando pasen por esos poblados para evitar más asesinatos.
Uno de ellos dijo que si no lo hacen, van a pedir que se retiren de esa zona porque la gente no confía en ellos.
El Mayor de Infantería, Gabriel Parraguirre escuchó las demandas y dijo que llevaría las peticiones a la Mesa de Coordinación.
Con estos casos suman 113 muertos en lo que va del año y 13 en lo que va del mes, presuntamente relacionado con el crimen organizado, de acuerdo con un conteo de El Sur.
Desde hace cinco años, la Policía Ciudadana de la UPOEG, se instaló en la comunidad de Barra Vieja, Lomas de Chapultepec y San Andrés.
En octubre del 2020, el comandante regional de la UPOEG, Ernesto Gallardo Grande, fue acribillado a balazos adentro de su automóvil, en en poblado de Lomas de Chapultepec.
LOS MILITARES DESARMARON HACE UNA SEMANA A LA UPOEG, DENUNCIAN
En declaraciones por teléfono, el líder de la UPOEG, Bruno Plácido Valerio, reclamó que los militares desarmaron a los policías de la UPOEG desde hace una semana, “no permitieron que los compañeros anden armados”.
Se quejó que la emboscada ocurrió a 100 metros del puesto de control militar en el poblado de Barra Vieja, y “los mataron desarmados”.
Criticó que en lugar de desarmar a los delincuentes, “a nosotros no nos permiten andar con las armas”. Ejemplificó que en Buena Vista de la Salud también desarmaron a los agentes de la UPOEG y también los atacaron.
Afirmó que la insistencia institucional contra la UPOEG es porque “todo está pasando en coincidencia”.
Dijo que el Ejército tiene la capacidad de bloquear en toda partes para detener a los delincuentes, “a los compañeros lo agarraron desarmados”.
Consideró que la “delincuencia trabaja con el Gobierno, por como pasaron las cosas”. Adelantó que se reorganizarán como UPOEG para evitar emboscadas en su contra.
Sostuvo que la organización UPOEG tiene nueve años funcionando y tiene tres enemigos, “la delincuencia, el Gobierno y la pobreza”.
“Tenemos nueve años y el Gobierno todavía nos ataca, nos desarma, nos persigue, tenemos órdenes de aprehensión y le ayudamos al Gobierno y por otro lado nos persigue”, reclamó.
Recalcó que la emboscada en Barra Vieja y el ataque en Buena Vista de la Salud, no va a debilitar la organización, porque “no vamos a permitir que avance la delincuencia, porque van a someter a la población” Dijo que al Estado, “no le interesa perseguir delincuentes, pero sí someter a la población”.